“El aroma del miedo” - Armando Rodera
Selasa, 24 Oktober 2017
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Hace cuatro años que leí “El color de la maldad”, la primera novela que leía del escritor madrileño Armando Rodera. Me gustó mucho y, por eso, he ido leyendo los demás libros que el autor ha ido publicando. Por eso, me hizo ilusión que publicara una nueva novela en la que recuperaba los personajes protagonistas de “El color de la maldad”, ésta de la que hoy os hablo
Éstas son mis impresiones
Armando Rodera
Armando Rodera es un escritor madrileño, ávido lector desde la infancia. Cursó estudios de Telecomunicaciones y trabajó diez años en el sector tecnológico hasta que comenzó a trabajar como funcionario para poder dedicarle más tiempo a la literatura.
Pionero de la publicación digital en España, desembarcó en Amazon con El color de la maldad, bestseller policial con los mismos protagonistas de esta obra, y La rebeldía del alma, thriller intimista que fue número 1 de Amazon.es. Su libro La posada del viajero, editado por Amazon Publishing, fue el tercer ebook más vendido en Amazon.es en 2016.
Cuenta con una amplia gama de novelas que van desde las aventuras o el misterio, hasta la distopía policial y la no ficción. Su obra ha atraído tanto a editoriales españolas como americanas, gracias a lo cual, la versión en inglés de El color de la maldad ha llegado a lectores de EE. UU., Reino Unido y Canadá.
Puedes seguir su obra en www.armandorodera.com y en www.facebook.com/ArmandoRoderaAutor.
Datos técnicos
Título: “El aroma del miedo”
Autor: Armando Rodera
Editorial: Amazon Publishing
Edición: tamaño bolsillo tapa blanda
Publicado en septiembre de 2017
Páginas: 496
ISBN: 978-154204538
PVP: 9,40 € en papel /4,99 en digital
Tapa blanda: 496 páginas
Argumento
Meses después de su último gran operativo, el inspector Bermejo deberá enfrentarse a una doble misión en Valencia: descubrir al causante de los misteriosos asesinatos de mujeres ocurridos en la región y acabar con una trama de corrupción en la que se ven involucrados algunos miembros de la Policía.
Por su parte, tras una excedencia, el sargento Roncero regresa a España junto a la periodista Miriam Monfort y recibe el encargo de colaborar en una importante operación de la Guardia Civil contra el tráfico de personas en la zona levantina.
Un macabro hallazgo en el puerto de Valencia los situará tras la pista de un empresario ruso con conexiones al más alto nivel. La presencia de mafias internacionales en la zona pondrá en jaque a los investigadores, envueltos en una trama cada vez más compleja, repleta de peligrosas ramificaciones.
Un thriller en el que los protagonistas deberán enfrentarse al lado más oscuro del ser humano y luchar encarnizadamente por sus vidas.
Impresiones
Tiempo después del caso que les unió en “El color del miedo”, el inspector Bermejo de la Policía Nacional, el sargento Roncero de la Guardia Civil y la periodista Miriam Monfort, se van a reencontrar en Valencia. A Bermejo le han encargado encontrar al asesino de mujeres que están operando en la zona en los últimos meses y, además, investigar una trama de corrupción que alcanza los más altos niveles, incluida la propia policía. A Roncero -que, casualmente, se encuentra de vacaciones con Miriam en la costa alicantina- le encargan investigar un complicado caso de tráfico de personas. Y la periodista aprovechará para enterarse de todo y luego contarlo en su periódico.
Aunque son casos distintos, acabarán por confluir y todos los personajes terminarán encontrándose y ayudándose mutuamente pues, como demostraron en la primera novela, forman un buen equipo.
“El aroma del miedo” es una novela que, en realidad, es dos novelas en una: una novela negra y un thriller. Hay dos tramas que, en realidad, podrían haber dado lugar a dos novelas diferenciadas pues ambas tienen la suficiente consistencia como para constituir el argumento de una historia completa pero lo cierto es que, combinadas, el resultado es aún mejor ya que la novela resulta más compleja e interesante.
Por un lado, tendríamos la trama de novela negra que sería la investigación de los asesinatos de mujeres. Un asesino en serie anda suelto por Valencia y a Bermejo le toca pararle los pies. Respecto a esta trama, resulta muy interesante el hecho de que no sólo vamos a asistir a la investigación policial sino también, y de primera mano, a las andanzas del propio asesino. No sabremos su nombre y apellidos hasta el final pero sí que le conoceremos, veremos exactamente lo que hace (yendo, así, un paso por delante de la policía) e intuiremos por qué lo hace. Siempre me han gustado las historias de asesinos en serie y ésta no es una excepción. El caso es interesante y la investigación se lleva con pulcritud y con sorpresa final incluida
Por otro lado, tenemos la parte de thriller en la que cabe un poco de todo: mafias rusas, trata de personas, corrupción policial… Todo entremezclado, con alguna que otra escena escabrosa (la inicial, sin ir más lejos, que pone los pelos de punta).
Las dificultades para llevar a cabo una investigación de este tipo son obvias. En la mayor parte de las ocasiones, implican a varios cuerpos policiales, a varios países incluso (la mayor parte de estas mafias cometen, al mismo tiempo, delitos en varios países) por lo que los operativos policiales son muy complejos y normalmente requiere mucho tiempo montarlos. Todo tiene que estar medido al milímetro, sincronizado a la perfección para que nadie se escape y todo quede bien atado. Creo que Armando ha reflejado muy bien esta complejidad y que lo que ocurre en la realidad bien puede ser bastante similar a lo que ocurre en esta novela.
Como he dicho al principio, varios de los personajes de esta novela son ya viejos conocidos por los lectores de Armando Rodera. Tenemos a Bermejo, Roncero y Miriam y algún otro cargo policial con un papel más secundario. Me ha hecho ilusión volvérmelos a encontrar y no me importaría asistir a alguna otra aventura suya. Mi preferido en esta ocasión ha sido, con mucho, Roncero. Miriam tiene menos papel que en la otra novela (o, cuando menos, no tiene un papel tan importante -por suerte para ella, por otra parte-) y, si bien el caso del asesino en serie que investiga Bermejo me ha gustado mucho, reconozco que Roncero está que se sale, sobre todo en esas escenas finales.
La novela toca temas muy actuales: la corrupción política y policial, la trata de personas (sobre todo de mujeres), la internet profunda, la relación entre los cuerpos policiales (difícil en la mayoría de las ocasiones), incluso de pasada la cooperación internacional en la lucha contra el delito, etc...
Las diferentes tramas están muy bien llevadas. Además, se enriquecen con subtramas paralelas en las que tendremos oportunidad de conocer a personajes interesantes como, por ejemplo, la jueza encargada del caso (que tiene un papelón). En todo caso, en todas ellas el autor mantiene la tensión narrativa, aumentando paulatinamente el ritmo e interés y guardando unas cuantas sorpresas en su interior. Hasta llegar a la traca final que, todo sea dicho, me ha encantado
A destacar también el guiño que el autor se hace a sí mismo: la periodista Miriam Monfort, tras los hechos ocurridos en la novela anterior, ha escrito un libro que ¿sabéis cómo se titula? ¡El color de la maldad!
El escenario es Valencia, tanto la propia ciudad como sus alrededores, especialmente la Albufera. Sin excederse en las descripciones, el autor da las suficientes notas para llevar allí al lector y para que a éste le dan ganas de ver los escenarios con sus propios ojos.
Conclusión final
“El aroma del miedo” es una novela negra y un thriller, con varias tramas y subtramas que la convierten en una novela rica y compleja en cuanto al contenido pero muy entretenida y de sencilla lectura en cuanto a la forma. Una novela que se lee sola, que te mantiene pegado a sus páginas, que a veces te horroriza y otras te deja con la boca abierta.
Argumento
Meses después de su último gran operativo, el inspector Bermejo deberá enfrentarse a una doble misión en Valencia: descubrir al causante de los misteriosos asesinatos de mujeres ocurridos en la región y acabar con una trama de corrupción en la que se ven involucrados algunos miembros de la Policía.
Por su parte, tras una excedencia, el sargento Roncero regresa a España junto a la periodista Miriam Monfort y recibe el encargo de colaborar en una importante operación de la Guardia Civil contra el tráfico de personas en la zona levantina.
Un macabro hallazgo en el puerto de Valencia los situará tras la pista de un empresario ruso con conexiones al más alto nivel. La presencia de mafias internacionales en la zona pondrá en jaque a los investigadores, envueltos en una trama cada vez más compleja, repleta de peligrosas ramificaciones.
Un thriller en el que los protagonistas deberán enfrentarse al lado más oscuro del ser humano y luchar encarnizadamente por sus vidas.
Impresiones
Tiempo después del caso que les unió en “El color del miedo”, el inspector Bermejo de la Policía Nacional, el sargento Roncero de la Guardia Civil y la periodista Miriam Monfort, se van a reencontrar en Valencia. A Bermejo le han encargado encontrar al asesino de mujeres que están operando en la zona en los últimos meses y, además, investigar una trama de corrupción que alcanza los más altos niveles, incluida la propia policía. A Roncero -que, casualmente, se encuentra de vacaciones con Miriam en la costa alicantina- le encargan investigar un complicado caso de tráfico de personas. Y la periodista aprovechará para enterarse de todo y luego contarlo en su periódico.
Aunque son casos distintos, acabarán por confluir y todos los personajes terminarán encontrándose y ayudándose mutuamente pues, como demostraron en la primera novela, forman un buen equipo.
“El aroma del miedo” es una novela que, en realidad, es dos novelas en una: una novela negra y un thriller. Hay dos tramas que, en realidad, podrían haber dado lugar a dos novelas diferenciadas pues ambas tienen la suficiente consistencia como para constituir el argumento de una historia completa pero lo cierto es que, combinadas, el resultado es aún mejor ya que la novela resulta más compleja e interesante.
Por un lado, tendríamos la trama de novela negra que sería la investigación de los asesinatos de mujeres. Un asesino en serie anda suelto por Valencia y a Bermejo le toca pararle los pies. Respecto a esta trama, resulta muy interesante el hecho de que no sólo vamos a asistir a la investigación policial sino también, y de primera mano, a las andanzas del propio asesino. No sabremos su nombre y apellidos hasta el final pero sí que le conoceremos, veremos exactamente lo que hace (yendo, así, un paso por delante de la policía) e intuiremos por qué lo hace. Siempre me han gustado las historias de asesinos en serie y ésta no es una excepción. El caso es interesante y la investigación se lleva con pulcritud y con sorpresa final incluida
Por otro lado, tenemos la parte de thriller en la que cabe un poco de todo: mafias rusas, trata de personas, corrupción policial… Todo entremezclado, con alguna que otra escena escabrosa (la inicial, sin ir más lejos, que pone los pelos de punta).
Las dificultades para llevar a cabo una investigación de este tipo son obvias. En la mayor parte de las ocasiones, implican a varios cuerpos policiales, a varios países incluso (la mayor parte de estas mafias cometen, al mismo tiempo, delitos en varios países) por lo que los operativos policiales son muy complejos y normalmente requiere mucho tiempo montarlos. Todo tiene que estar medido al milímetro, sincronizado a la perfección para que nadie se escape y todo quede bien atado. Creo que Armando ha reflejado muy bien esta complejidad y que lo que ocurre en la realidad bien puede ser bastante similar a lo que ocurre en esta novela.
Como he dicho al principio, varios de los personajes de esta novela son ya viejos conocidos por los lectores de Armando Rodera. Tenemos a Bermejo, Roncero y Miriam y algún otro cargo policial con un papel más secundario. Me ha hecho ilusión volvérmelos a encontrar y no me importaría asistir a alguna otra aventura suya. Mi preferido en esta ocasión ha sido, con mucho, Roncero. Miriam tiene menos papel que en la otra novela (o, cuando menos, no tiene un papel tan importante -por suerte para ella, por otra parte-) y, si bien el caso del asesino en serie que investiga Bermejo me ha gustado mucho, reconozco que Roncero está que se sale, sobre todo en esas escenas finales.
La novela toca temas muy actuales: la corrupción política y policial, la trata de personas (sobre todo de mujeres), la internet profunda, la relación entre los cuerpos policiales (difícil en la mayoría de las ocasiones), incluso de pasada la cooperación internacional en la lucha contra el delito, etc...
Las diferentes tramas están muy bien llevadas. Además, se enriquecen con subtramas paralelas en las que tendremos oportunidad de conocer a personajes interesantes como, por ejemplo, la jueza encargada del caso (que tiene un papelón). En todo caso, en todas ellas el autor mantiene la tensión narrativa, aumentando paulatinamente el ritmo e interés y guardando unas cuantas sorpresas en su interior. Hasta llegar a la traca final que, todo sea dicho, me ha encantado
A destacar también el guiño que el autor se hace a sí mismo: la periodista Miriam Monfort, tras los hechos ocurridos en la novela anterior, ha escrito un libro que ¿sabéis cómo se titula? ¡El color de la maldad!
El escenario es Valencia, tanto la propia ciudad como sus alrededores, especialmente la Albufera. Sin excederse en las descripciones, el autor da las suficientes notas para llevar allí al lector y para que a éste le dan ganas de ver los escenarios con sus propios ojos.
Conclusión final
“El aroma del miedo” es una novela negra y un thriller, con varias tramas y subtramas que la convierten en una novela rica y compleja en cuanto al contenido pero muy entretenida y de sencilla lectura en cuanto a la forma. Una novela que se lee sola, que te mantiene pegado a sus páginas, que a veces te horroriza y otras te deja con la boca abierta.
Podéis comprarla en Amazon, tanto en papel como en digital, en el siguiente enlace:
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