“El libro de los Baltimore” - Joël Dicker
Hace dos o tres veranos leí “La verdad sobre el caso Harry Quebert; un libro que me encantó. Paradigma de la adicción: me creó tanta necesidad de leer, que al final estaba ya casi con taquicardias por no poder parar de hacerlo
Hoy os traigo la reseña de “El libro de los Baltimore” que, no sólo es del mismo autor, sino que recupera uno de los personajes de aquél: su protagonista Marcus Goldman. Se vende como su continuación pero, para mí, es más bien una precuela por lo que no es en nada necesario haber leído el anterior libro para leer éste
Joël Dicker
Joël Dicker nació en Suiza en 1985.
Su primera novela, Los últimos días de nuestros padres, que Alfaguara publicará en 2014, está basada en la desconocida historia de una unidad de inteligencia británica encargada de entrenar a la resistencia francesa durante la Segunda Guerra Mundial y resultó ganadora en 2010 del Premio de los Escritores Ginebrinos.
Su segunda novela, La verdad sobre el caso Harry Quebert (2012), descrita como un cruce entre Larsson, Nabokov y Philip Roth, ha recibido el favor del público y de la crítica más exigente, y ha sido galardonada con el Premio Goncourt des Lycéens, el Gran Premio de Novela de la Academia Francesa y el Premio Lire a la mejor novela en lengua francesa. Su traducción a treinta y tres idiomas la confirma como el nuevo fenómeno literario global.
Además, ha escrito “EL libro de los Baltimore” y “Los últimos días de nuestros padres”
www.joeldicker.com
www.facebook.com/joeldickeralfaguara
Datos técnicos
Título: “EL libro de los Baltimore”
Autor: Joël Dicker
Editorial: Alfaguara
Edición: tapa blanda con solapas
Editado en mayo de 2016
Páginas: 479
Precio: 21,90 euros la edición en papel / 12,99 euros el ebook
ISBN: 9788420417349
Argumento
«Si encontráis este libro, por favor, leedlo. Querría que alguien supiera la historia de los Goldman-de-Baltimore.»
Hasta que tuvo lugar el Drama existían dos ramas de la familia Goldman: los Goldman de Baltimore y los Goldman de Montclair. Los Montclair, de los que forma parte Marcus Goldman, autor de La verdad sobre el caso Harry Quebert, es una familia de clase media que vive en una pequeña casa en el estado de Nueva Jersey. Los Baltimore, prósperos y a los que la suerte siempre ha sonreído, habitan una lujosa mansión en un barrio de la alta sociedad de Baltimore.
Ocho años después del Drama, Marcus Goldman pone el pasado bajo la lupa en busca de la verdad sobre el ocaso de la familia. Entre los recuerdos de su juventud revive la fascinación que sintió desde niño por los Baltimore, que encarnaban la América patricia con sus vacaciones en Miami y en los Hamptons y sus colegios elitistas. Con el paso de los años la brillante pátina de los Baltimore se desvanece al tiempo que el Drama se va perfilando. Hasta el día en el que todo cambia para siempre.
Impresiones
Marcus Goldman es un escritor de éxito que se ha retirado a escribir su nueva novela en una tranquila casita. Han pasado ocho años del Drama. Ya desde el principio sabemos que algo pasó en su familia, un terrible Drama, que nos tocará descubrir. Marcus pertenece a los Goldman de Montclair, como se conocía a sus padres y a él mismo para diferenciarlos de los Goldman de Baltimore: sus tíos y su primo Hillel. Los Montclair son una familia de clase media mientras que los Baltimore llevaban una vida mucho más desahogada que Marcus siempre ha envidiado.
Marcus irá rememorando sus recuerdos de infancia, adolescencia y juventud para contarnos cómo eran los Goldman y qué pasó con ellos.
La novela arranca en el año 2012, poco tiempo después de los hechos relatados en “La verdad sobre el caso Harry Quebert”. Pero esta novela no tiene nada que ver con la anterior; no se hace para nada referencia a dichos hechos y lo único que hace el autor es recuperar a su protagonista, Marcus, y a algún otro personaje como la madre de éste.
Mediante continuos flashbacks, la novela se retrotaerá a los años 90 para descubrirnos a los Goldman niños y luego a los Goldman jóvenes, ocupando más o menos ocho años de su vida, desde los diez hasta los dieciocho años.
Los flashbacks serán continuos y, lo mismo nos encontramos en el presente que, poco después, en los 90. Esta estructura permite al autor ir dejando miguitas por el camino, ir soltando pizcas de información que nos harán querer saber qué pasó. Porque está claro que pasó algo muy muy grave, un Drama, así con mayúsculas.
Marcus siempre ha tenido envidia de la otra rama de la familia, los Baltimore, a los que considera mucho más cultos, inteligentes y glamourosos que su propia familia. Adora a sus tíos Saúl y Anita y a su primo Hillel. A ellos se les unió pronto Woody, un chiquillo de la edad de Hillel y Marcus que llevaba mala vida y que, sin adoptarle realmente, los Baltimore incorporaron a su vida.
Hillel, Woody y Marcus formarán la banda de los primos Goldman y Marcus será feliz con ellos, acercándose a la residencia de los Baltimore siempre que tiene unos días de vacaciones en su colegio y posterior Universidad. A estos tres, se les unirá Alexandra, la encantadora hermana mayor de un amigo, que encandilará a los tres chiquillos
Es éste un libro bastante diferente de “La verdad sobre el caso Harry Quebert”. Aquél era un thriller o una novela negra (o ambas cosas). Éste yo no lo calificaría como tal. Si bien hay mucha tensión como en el mejor de los thriller y algún crimen, no creo que pueda considerarse como tal. Casi más es una novela de intrigas familiares. Y, también y sobre todo, es una novela sobre la amistad: la amistad entre Marcus, Hillel y Woody. Hillel es un chico menudito y muy inteligente que no consigue encajar en ningún colegio, siendo objeto de burlas cuando no de bullying directamente en todos los colegios por los que ha pasado. Woody es el típico niño de familia desestructurada que se está criando en la calle y con malas compañías y que va derecho a una carrera delictiva; pero la amistad con Saúl y Hillel no sólo le salva a él sino también a Hillel pues Woody será su protector y ya nadie se meterá con él. Hillel y Woody están juntos todo el día; Marcus sólo en vacaciones, no obstante su integración en el grupo es completa y los tres son, como los mosqueteros, uno para todos y todos para uno. Se ayudarán, se protegerán hasta el final. Ni siquiera ella, la mujer que siempre hay en toda historia, logrará separarles a pesar de que los tres beben los vientos por ella. La verdad es que la historia de la amistad de los chicos Goldman es francamente bonita
Los personajes están perfectamente perfilados. Como no son muchos, el autor puede dedicarles la suficiente atención para hacerlos creíbles. Todos ellos acaban ganándose el corazón del lector; cada uno con sus cosas buenas y sus cosas malas porque, eso sí, son personas reales y, como tales, a veces actúan correctamente y otras se equivocan. A los jóvenes de la familia, les vamos a conocer siendo niños y veremos cómo crecen y cómo van evolucionando al pasar a la adolescencia y luego a la juventud. En este sentido, es también una novela de maduración. Me encantan estas novelas en las que vemos “crecer” a los personajes; es bonito ver cómo se van adaptando a los cambios en su vida, cómo van creciendo no sólo físicamente, cómo a veces se desvían y otras siguen el camino que ya desde pequeño se veía que iban a seguir… Y en esta novela este proceso de crecimiento se ve perfectamente.
Además de una historia de familia y una historia de amistad, la novela tiene también un punto metaliterario. No hay que olvidar que Marcus es escritor y que está escribiendo un libro. Curiosamente, el jubilado que vive en la casita al lado de la suya también tiene la idea de escribir un libro y, al saber que Marcus es un escritor de éxito, le pedirá consejo.
Aunque esta novela no es un thriller, comparte algunas características típicas de estos libros: tensión narrativa constante y creciente, capítulos que terminan dejándote la miel en la boca, giros argumentales, sorpresas y un final de infarto totalmente imprevisible (no en la medida del caso Harry Quebert pero existen) Es inevitable darle mil vueltas a cuál puede ser ese Drama del que se nos habla desde el principio. Hice mil cábalas pero no acerté ni de lejos; por eso el final me dejó totalmente k.o., con la boca abierta, sorprendida y encantada.
“La verdad sobre el caso Harry Quebert” me encantó y tenía las expectativas altísimas con este libro que, además, parecía que tenía bastante que ver con aquél aún siendo diferente. Siempre es un peligro empezar un libro con altas expectativas porque se corre el riesgo de, aún siendo bueno, decepcionarnos. Os aseguro que no ha sido el caso: “El libro de los Baltimore” me ha encantado. Lo he devorado, totalmente enganchada a sus páginas y a sus personajes y me ha parecido una novela redonda
Conclusión final
En resumen, me ha gustado muchísimo este libro. Diferente del caso Harry Quebert pero igual de bueno. Una novela más intimista y con personajes más dibujados que la anterior (aunque aquélla ya los tenía también bastante caracterizados), con un poco menos de ritmo pero con mucha intriga y tensión narrativa. Me ha entretenido, me ha enganchado e incluso me ha emocionado.
Ocho años después del Drama, Marcus Goldman pone el pasado bajo la lupa en busca de la verdad sobre el ocaso de la familia. Entre los recuerdos de su juventud revive la fascinación que sintió desde niño por los Baltimore, que encarnaban la América patricia con sus vacaciones en Miami y en los Hamptons y sus colegios elitistas. Con el paso de los años la brillante pátina de los Baltimore se desvanece al tiempo que el Drama se va perfilando. Hasta el día en el que todo cambia para siempre.
Impresiones
Marcus Goldman es un escritor de éxito que se ha retirado a escribir su nueva novela en una tranquila casita. Han pasado ocho años del Drama. Ya desde el principio sabemos que algo pasó en su familia, un terrible Drama, que nos tocará descubrir. Marcus pertenece a los Goldman de Montclair, como se conocía a sus padres y a él mismo para diferenciarlos de los Goldman de Baltimore: sus tíos y su primo Hillel. Los Montclair son una familia de clase media mientras que los Baltimore llevaban una vida mucho más desahogada que Marcus siempre ha envidiado.
Marcus irá rememorando sus recuerdos de infancia, adolescencia y juventud para contarnos cómo eran los Goldman y qué pasó con ellos.
La novela arranca en el año 2012, poco tiempo después de los hechos relatados en “La verdad sobre el caso Harry Quebert”. Pero esta novela no tiene nada que ver con la anterior; no se hace para nada referencia a dichos hechos y lo único que hace el autor es recuperar a su protagonista, Marcus, y a algún otro personaje como la madre de éste.
Mediante continuos flashbacks, la novela se retrotaerá a los años 90 para descubrirnos a los Goldman niños y luego a los Goldman jóvenes, ocupando más o menos ocho años de su vida, desde los diez hasta los dieciocho años.
Los flashbacks serán continuos y, lo mismo nos encontramos en el presente que, poco después, en los 90. Esta estructura permite al autor ir dejando miguitas por el camino, ir soltando pizcas de información que nos harán querer saber qué pasó. Porque está claro que pasó algo muy muy grave, un Drama, así con mayúsculas.
Marcus siempre ha tenido envidia de la otra rama de la familia, los Baltimore, a los que considera mucho más cultos, inteligentes y glamourosos que su propia familia. Adora a sus tíos Saúl y Anita y a su primo Hillel. A ellos se les unió pronto Woody, un chiquillo de la edad de Hillel y Marcus que llevaba mala vida y que, sin adoptarle realmente, los Baltimore incorporaron a su vida.
Hillel, Woody y Marcus formarán la banda de los primos Goldman y Marcus será feliz con ellos, acercándose a la residencia de los Baltimore siempre que tiene unos días de vacaciones en su colegio y posterior Universidad. A estos tres, se les unirá Alexandra, la encantadora hermana mayor de un amigo, que encandilará a los tres chiquillos
Es éste un libro bastante diferente de “La verdad sobre el caso Harry Quebert”. Aquél era un thriller o una novela negra (o ambas cosas). Éste yo no lo calificaría como tal. Si bien hay mucha tensión como en el mejor de los thriller y algún crimen, no creo que pueda considerarse como tal. Casi más es una novela de intrigas familiares. Y, también y sobre todo, es una novela sobre la amistad: la amistad entre Marcus, Hillel y Woody. Hillel es un chico menudito y muy inteligente que no consigue encajar en ningún colegio, siendo objeto de burlas cuando no de bullying directamente en todos los colegios por los que ha pasado. Woody es el típico niño de familia desestructurada que se está criando en la calle y con malas compañías y que va derecho a una carrera delictiva; pero la amistad con Saúl y Hillel no sólo le salva a él sino también a Hillel pues Woody será su protector y ya nadie se meterá con él. Hillel y Woody están juntos todo el día; Marcus sólo en vacaciones, no obstante su integración en el grupo es completa y los tres son, como los mosqueteros, uno para todos y todos para uno. Se ayudarán, se protegerán hasta el final. Ni siquiera ella, la mujer que siempre hay en toda historia, logrará separarles a pesar de que los tres beben los vientos por ella. La verdad es que la historia de la amistad de los chicos Goldman es francamente bonita
Los personajes están perfectamente perfilados. Como no son muchos, el autor puede dedicarles la suficiente atención para hacerlos creíbles. Todos ellos acaban ganándose el corazón del lector; cada uno con sus cosas buenas y sus cosas malas porque, eso sí, son personas reales y, como tales, a veces actúan correctamente y otras se equivocan. A los jóvenes de la familia, les vamos a conocer siendo niños y veremos cómo crecen y cómo van evolucionando al pasar a la adolescencia y luego a la juventud. En este sentido, es también una novela de maduración. Me encantan estas novelas en las que vemos “crecer” a los personajes; es bonito ver cómo se van adaptando a los cambios en su vida, cómo van creciendo no sólo físicamente, cómo a veces se desvían y otras siguen el camino que ya desde pequeño se veía que iban a seguir… Y en esta novela este proceso de crecimiento se ve perfectamente.
Además de una historia de familia y una historia de amistad, la novela tiene también un punto metaliterario. No hay que olvidar que Marcus es escritor y que está escribiendo un libro. Curiosamente, el jubilado que vive en la casita al lado de la suya también tiene la idea de escribir un libro y, al saber que Marcus es un escritor de éxito, le pedirá consejo.
Aunque esta novela no es un thriller, comparte algunas características típicas de estos libros: tensión narrativa constante y creciente, capítulos que terminan dejándote la miel en la boca, giros argumentales, sorpresas y un final de infarto totalmente imprevisible (no en la medida del caso Harry Quebert pero existen) Es inevitable darle mil vueltas a cuál puede ser ese Drama del que se nos habla desde el principio. Hice mil cábalas pero no acerté ni de lejos; por eso el final me dejó totalmente k.o., con la boca abierta, sorprendida y encantada.
“La verdad sobre el caso Harry Quebert” me encantó y tenía las expectativas altísimas con este libro que, además, parecía que tenía bastante que ver con aquél aún siendo diferente. Siempre es un peligro empezar un libro con altas expectativas porque se corre el riesgo de, aún siendo bueno, decepcionarnos. Os aseguro que no ha sido el caso: “El libro de los Baltimore” me ha encantado. Lo he devorado, totalmente enganchada a sus páginas y a sus personajes y me ha parecido una novela redonda
Conclusión final
En resumen, me ha gustado muchísimo este libro. Diferente del caso Harry Quebert pero igual de bueno. Una novela más intimista y con personajes más dibujados que la anterior (aunque aquélla ya los tenía también bastante caracterizados), con un poco menos de ritmo pero con mucha intriga y tensión narrativa. Me ha entretenido, me ha enganchado e incluso me ha emocionado.
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